INDEPENDENCIA CRIOLLA DEL PERÚ


Por: Augusto Caña Mamani “Sinshi Cahuide”

Nosotros miramos a nuestros hermanos con ojos no colonizados; caminamos por nuestros caminos sin ser extraños; amamos a nuestra tierra sin profanar su señera entraña; la reivindicación de JUSTICIA HISTÓRICA, no radica en hipotecar nuestro porvenir a los dogmas foráneos que son salvavidas de plomo; tampoco nuestra lucha no es por compasión oprimida de nuestro pueblo: Como NUEVA FUERZA DE LIBERACIÓN, in surgimos por un noble causa de LIBERTAD y por la vigencia irreductible de su trascender milenaria como Nación ancestral del TAWAINTISUYU. Apotegma revolucionaria de los Amautas

Tawaintisuyu es dueño de enigmáticas obras líticas, más menesterosos y erudito del grandioso pasado con pensamiento único de desarrollo milenario. Somos un pueblo valeroso con espíritu de gigante: En esta época de usura y neocolonización mundial; los nacionalistas somos impedidos de tener una vida propia como lo fue durante milenios de paz y armonía.En 1798; tomada la Bastilla y guillotinado el Rey; con etiqueta de libertad, igualdad y fraternidad; la revolución francesa parió la democracia europea: Este, cual novedad política, enrumbó hacia América.

Los ejércitos libertinos de San Martín y Bolívar, tirando el carruaje de ese “abolorio democracia” trucan la independencia de las naciones sudamericanas. Al paso de la historia se observa un distintivo; Sudamérica fue invadido por España y Portugal. Los Iberianos no enraizaron el dominio absoluto, solo instauraron el poder virreinal de opresión; donde el clero implantó la implacable inquisición y los corregidores desataron un abuso descomunal: Frente a ello, se produjo una continua revuelta.En el llamado “Perú”; el 28 de julio de 1821; comenzó un episodio negro de fraude y del engaño.

Una vez proclamada la “independencia” del Perú, el derecho de la fuerza y el control del Estado quedó en el poder de los criollos españoles de aquí. El apotegma de libertad no es más que una idea vana vociferada por esas fieras salvajes de rapiña.Primero hubo el colonialismo virreynal y clérigo, después el colonialismo político del marxismo: En el Perú, la libertad política no es un hecho, la aplicación teórica del llamado liberalismo, solo sirvió como cebo para atraer las multitudes y desde las primeras épocas de la independencia vivimos sometidos al poder bruto de esta opresión.

Sabemos que el criollismo es producto biológico racial europea, son engendros de la semilla maldita, inoculados vía violación forzada por los invasores: Su pensamiento está muy lejos de nuestra realidad y que no guarda intima relación a la madre tierra. Así lo identifica su espuria alienación cultural, por eso, ellos optan por el etnocentrismo colonial.La llamada “independencia” Republicana del Perú, ocurrido en el Tawaintisuyu; el 28 de julio de 1821: No fue una gesta de liberación etno nacionalista, fue un fraude histórico, intrascendente y falaz, solevantado por los españoles criollos de aquí.

En este infausto episodio, nuestros padres fueron utilizados por ambos partes como carne de cañón.Desde entonces como patente de su sacra victoria, los ejércitos de San Martín y Simón Bolívar, aliados con el rancio abolengo del ex virreinato, implantan la neo República estulticia del Perú. Donde también instauran como el modelo político, su democracia dicotómica, famélica y hemipléjica, con secuela de 187 años de discriminación racial.Después de la “independencia” criolla del Perú; el latifundismo gamonal de la horca y cuchillo, como odiosa casta cretina del racismo occidental; tuvieron marcados momentos de triunfo, dominación, explotación gratuita de los quechuas y aymaras: Igualmente la oligarquía son sicópatas incurables y tienen sueños de gloria y espíritu de tiranía.

El español Francisco Pizarro, el trocador del Perú, autor del monstruoso crimen histórico en Cajamarca, bestia inmunda de andar erguido de su caballería y fundador de Lima colonial con rostro virreynal: Como prolífico padre de los gobernantes criollos, tiene un monumento como la idolatría sanguinaria, intrínseca y bobada de la condescendencia iberiana.Los historiadores sostienen que: Antes de 1532; el Tawaintisuyu tenía 10 millones de habitantes. Proclamado la “independencia” de la República; el Perú de 1821; tenía solo un millón de habitantes. ¿Qué reflexiones merece esta lesa etno genocidio? En los tres siglos de dominación queda un saldo humano reducido solo a un millón de habitantes.

Ante el temor de ver emerger nuestra liberación, los españoles de aquí, para eclipsar toda verdad, declaran su falaz “independencia” criolla del Perú y invocando con alardismo el derecho de posición dicen: “Justicia de su causa que Dios defiende”.

Así el Estado-Nación peruana fue proclamado bajo la imponencia política y sutileza colonial europea.A lo largo de la nefasta historia de dominación, el gamonalismo fue el peor enemigo del indígena; durante siglos, esta opulencia de vil explotación, aparte de desheredar a nuestras tierras comunales; practicó la política inhumana de exterminación. La “independencia” no cambió el sistema colonial, el feudalismo y la servidumbre no fueron abolidos.

En la Republiquita criolla del Perú; durante en estos 187 años de trauma política cívico-militar; son los mismos gobernantes que manejan el poder, son los mismos “demócratas” de fatuidad y fallas despropósitos, que terminan el charco de la corrupción. Su democracia europea es sinónimo de libertinaje, lironda, vertical, lupanar, hipócrita y ambigua.

Desde la instauración del neo Estado peruano, la república es hacienda del colonialismo interno y el Perú adolece de un nacionalismo deficitario, practicado por los rancios políticos criollos de la condescendencia occidental y rostro racista: Ellos son ajenos a nuestro espíritu nacional: Lo nuestro es auténtico, genuino y nacionalista. El poder judicial peruana, como fieles herederos de aquella “sacrosanta” audiencia real española; Es báculo de manipulación y peste de corrupción, donde los fiscales, jueces y secretarios criollos, aparte de meter miedo patético a los incautos: Son miserables ladrones y asaltantes de corbata; estos son desenmascarados a diario por la prensa.

Este mismo poder judicial de rostro occidental, son administrados por los autocráticos criollos y como condescendencia del gamonalismo y oligarquía, terminan imponiendo, trastocando principios y valores que las leyes de la república determinan. El caso más discriminante y del impasse normativa se comete contra los etnocaceristas encarcelados.El sistema ideo-político de la democracia peruana, es calco y copia de las constituciones europeas: Su aparato judicial es protector de la corrupción que persigue y condena a los que claman justicia: Frente a este insidia y ogro manipulador de siglos: La rebeldía es una manera de proyectar el cambio y también es expresión de lucha mejor que el miedo.

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