EXPERTOS CREEN QUE BLOQUEO AL ESTRECHO DE ORMUZ PERJUDICARÁ A IRÁN
Expertos creen que bloqueo al estrecho de Ormuz perjudicará a Irán
En vista de las amenazas de Teherán, el gobierno de Estados Unidos ha subrayado que salvaguardará las rutas marítimas internacionales.
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Ministro iraní Ali-Akbar Salehi y homólogo turco Ahmet Davutoglu (Efe)
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EL UNIVERSAL
jueves 5 de enero de 2012 11:13 AM
Tel Aviv, Israel.- La polémica por el programa nuclear en Irán se agrava y Teherán, además de exibir sus maniobras militares en el mar, ha amenazado con cerrar el estrecho de Ormuz si Occidente endurece las sanciones contra Irán. Y parece que ese es el escenario que se avecina, pues la Unión Europea prepara un embargo del petróleo procedente de la nación persa. El estrecho de Ormuz, en el golfo Pérsico, está considerado como una ruta vital y su cierre podría tener consecuencias económicas dramáticas en todo el mundo.
Israel sigue con gran atención como se tensa la situación en el golfo Pérsico. En noviembre pasado, esta nación mediterránea pidió que se endurecieran las sanciones contra Irán tras la publicación del informe de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA), en que se indica que Teherán podría estar trabajando en el desarrollo de una bomba nuclear. Y en Israel se debatió abiertamente sobre un posible ataque militar contra Irán, destacó DPA.
Para analistas en Tel Aviv, las amenazas iraníes constituyen una clara muestra de que el régimen islámico se encuentra bajo presión. "La tensión crece y el nerviosismo aumenta", dijo Yoel Guzansky, miembro del Instituto para Estudios de la Seguridad Nacional (ISSN) en Tel Aviv.
Guzansky considera poco probable que se vaya a cerrar el estrecho de Ormuz, una de las rutas comerciales más importantes del mundo. "Con ello se estarían disparando en su propio pie", dijo Guzansky.
El propio régimen de Teherán depende para existir de las exportaciones de crudo y no dispone de otras rutas alternativas para transportarlo. "Además, afectaría a todo el mundo", agregó el experto, para quien el bloqueo del estrecho de Ormuz podría "amenazar la estabilidad de todo el régimen".
Según datos del gobierno estadounidense, a través del estrecho circula más del 35% del crudo que se trasporta en barco y una quinta parte del trasporte mundial de crudo. Un bloqueo de esa vía afectaría a todo el mundo, porque los precios del crudo podrían dispararse.
En vista de las amenazas de Teherán, el gobierno de Estados Unidos ha subrayado que salvaguardará las rutas marítimas internacionales.
Guzansky duda de la capacidad de la marina iraní para mantener un bloqueo del estrecho. De llegar a un conflicto militar en el mar, la Marina iraní tendría pocas posiblidades. En opinión del analista, "la quinta flota los eliminaría en pocos días".
Por su parte, David Menashri, un experto israelí en Irán, ve con preocupación el claro "endurecimiento de la retórica entre Estados Unidos e Irán" desde hace unos días. "Me temo que se trata de una escalada del conflicto en el Golfo y no porque ninguna de las partes lo quiera, sino porque se ha puesto en marcha una dinámica propia", añadió. "Si Irán cierra el estrecho de Ormuz, sería un paso bélico".
Los expertos consideran las amenazas iraníes sobre todo como un intento desesperado de evitar las sanciones internacionales. "Irán intenta evitar que se tome esa media y colocar a vista de todo el mundo el precio del conflicto", dijo Guzansky. Y al parecer lo ha hecho con éxito: "La primera víctima de la nueva guerra en Cercano Oriente podría ser la recuperación económica en Estados Unidos y Europa", agrega un comentarista del think-tank estadounidense Brookings.
Israel sigue con gran atención como se tensa la situación en el golfo Pérsico. En noviembre pasado, esta nación mediterránea pidió que se endurecieran las sanciones contra Irán tras la publicación del informe de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA), en que se indica que Teherán podría estar trabajando en el desarrollo de una bomba nuclear. Y en Israel se debatió abiertamente sobre un posible ataque militar contra Irán, destacó DPA.
Para analistas en Tel Aviv, las amenazas iraníes constituyen una clara muestra de que el régimen islámico se encuentra bajo presión. "La tensión crece y el nerviosismo aumenta", dijo Yoel Guzansky, miembro del Instituto para Estudios de la Seguridad Nacional (ISSN) en Tel Aviv.
Guzansky considera poco probable que se vaya a cerrar el estrecho de Ormuz, una de las rutas comerciales más importantes del mundo. "Con ello se estarían disparando en su propio pie", dijo Guzansky.
El propio régimen de Teherán depende para existir de las exportaciones de crudo y no dispone de otras rutas alternativas para transportarlo. "Además, afectaría a todo el mundo", agregó el experto, para quien el bloqueo del estrecho de Ormuz podría "amenazar la estabilidad de todo el régimen".
Según datos del gobierno estadounidense, a través del estrecho circula más del 35% del crudo que se trasporta en barco y una quinta parte del trasporte mundial de crudo. Un bloqueo de esa vía afectaría a todo el mundo, porque los precios del crudo podrían dispararse.
En vista de las amenazas de Teherán, el gobierno de Estados Unidos ha subrayado que salvaguardará las rutas marítimas internacionales.
Guzansky duda de la capacidad de la marina iraní para mantener un bloqueo del estrecho. De llegar a un conflicto militar en el mar, la Marina iraní tendría pocas posiblidades. En opinión del analista, "la quinta flota los eliminaría en pocos días".
Por su parte, David Menashri, un experto israelí en Irán, ve con preocupación el claro "endurecimiento de la retórica entre Estados Unidos e Irán" desde hace unos días. "Me temo que se trata de una escalada del conflicto en el Golfo y no porque ninguna de las partes lo quiera, sino porque se ha puesto en marcha una dinámica propia", añadió. "Si Irán cierra el estrecho de Ormuz, sería un paso bélico".
Los expertos consideran las amenazas iraníes sobre todo como un intento desesperado de evitar las sanciones internacionales. "Irán intenta evitar que se tome esa media y colocar a vista de todo el mundo el precio del conflicto", dijo Guzansky. Y al parecer lo ha hecho con éxito: "La primera víctima de la nueva guerra en Cercano Oriente podría ser la recuperación económica en Estados Unidos y Europa", agrega un comentarista del think-tank estadounidense Brookings.
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