Están quemando los libros

 

Larry Romanoff
Blue Moon of Shanghai
jue, 22 mayo 2025 07:49 UTC

Traducido por el equipo de SOTT.net

No hay duda de que hoy es más difícil buscar en Internet que hace 15 o 20 años. Especialmente en Internet en lengua inglesa, el control de la información es mucho más evidente y eficaz, y la censura es ahora totalmente abierta, sin apenas disimulo ni pretensión. Muchas páginas web o documentos que antes aparecían siempre en la primera página de una búsqueda, ahora no pueden consultarse por medios normales y, cada vez más, se han suprimido muchas fuentes importantes. [¹]

No hay ninguna diferencia sustancial entre quemar libros físicamente y borrar documentos de Internet. El resultado es el mismo.

Esto es tan cierto, y los contenidos borrados siguen un patrón tan definido que es razonable suponer que hay ejércitos de personas dedicadas a sanear Internet, quemando de hecho los libros. Todos los temas están relacionados con historia enterrada, crímenes inconfesables olvidados hace tiempo, casi cualquier cosa relacionada con los judíos o con Israel, incluidos crímenes judíos como la farsa del opio en China, entre muchos otros. No hay ninguna diferencia sustancial entre quemar libros físicamente y borrar documentos de Internet. El resultado es el mismo.

Algunos enlaces a documentos históricos que guardé hace 15 o 20 años siguen activos, y todavía se puede acceder a los documentos, pero ya no aparecerán en una búsqueda con ningún término. A menudo ocurre que, aunque se conozca el título completo de un documento, los motores de búsqueda (especialmente Google) se niegan a mostrarlo. Esto es tan cierto que Google (en particular) ya no funciona como un motor de búsqueda útil, sino como un "guardián" con dos funciones principales. La primera es ofrecerte la información que quiere que tengas (o las cosas que quiere que pienses), y la segunda es asegurarse de que nunca encuentres la información que no quiere que tengas (o las cosas que no quiere que pienses). Puede que no quieras oír esto, pero ChatGPT no es mejor en ningún aspecto. Recibe sus órdenes de marcha del mismo lugar que Google y el New York Times.

El punto de lo anterior es que esos "miembros del ejército" siguen una agenda ideológica, y están depurando activamente Internet de importantes documentos históricos y de otro tipo y fuentes de información que son incómodas principalmente para los judíos. Esto me lo recordaron hace tiempo, y tuvo que ocurrirme dos veces antes de que aprendiera la lección.

Brevemente, en dos ocasiones con aproximadamente un mes de diferencia, recibí un correo electrónico solicitando enlaces de referencia sobre temas específicos de uno de mis artículos. La primera solicitud procedía del propietario de un conocido sitio web de "noticias alternativas" en el que había publicado muchos artículos, y me pedía "un par de referencias" sobre el tema de un artículo que había enviado para su publicación. Confiaba en la petición, así que accedí, pero me sorprendió descubrir unos días después que esas referencias habían sido eliminadas de los sitios web. Los sitios seguían ahí, pero las páginas concretas habían desaparecido, borradas en los días anteriores. En aquel momento pensé que se trataba de una mera coincidencia, de mala suerte. Sin embargo, unas semanas más tarde recibí otro mensaje similar, este de un nombre y una dirección que no conocía. El autor elogiaba mis escritos, hacía referencia al contenido de uno de mis artículos y afirmaba que él también estaba muy interesado en ese tema. Me pidió "dos o tres referencias" para poder investigar mejor el tema. Accedí, y con el mismo resultado. Me sorprendió descubrir unos días más tarde que esas referencias habían sido borradas, las páginas eliminadas de los sitios web. Fue entonces cuando me di cuenta de que me habían engañado, no los ciberdelincuentes directamente, sino otros que les ayudaban. Ambos conjuntos de referencias se referían a grandes crímenes cometidos por los judíos, pero que formaban parte de la "historia enterrada".

Por ejemplo, poca gente sabe que, tras la Segunda Guerra Mundial, Alemania fue saqueada hasta los huesos por los "vencedores", hasta límites insospechados. Era posible encontrar literalmente cientos de fotos de fábricas alemanas a las que se les retiraba toda su maquinaria, se cargaba en vagones de mercancías y se enviaba a uno u otro país como "reparación". Todas las fábricas importantes de Alemania fueron desmanteladas y se les retiró toda la maquinaria y los activos. En aquel momento (hace 8 o 10 años), no guardé ninguna de las fotos porque eran muchas y supuse que siempre estarían ahí. Pero no fue así. Más recientemente, quise escribir un artículo sobre estas perversidades y me sorprendió comprobar que todas las fotos habían sido eliminadas de Internet. Había guardado algunas URL, pero esos enlaces estaban muertos. Busqué durante horas sin éxito. Pedí a amigos de países de Europa Occidental y Oriental que me buscaran en sus buscadores locales. Nada. Abandoné Google y Bing, y probé con Yandex, Baidu y otros, con el mismo resultado. Parecía que todas las fotos de fábricas alemanas saqueadas habían sido eliminadas de Internet.

Os daré otro ejemplo, este de México. Hace unos años, los medios de comunicación mexicanos se hicieron eco de un hecho sorprendente. Los empleados de Coca-Cola México habían votado abrumadoramente a favor de formar un sindicato, pero los medios informaron que todos los empleados fueron obligados inmediatamente a dimitir, muchos de ellos al parecer a punta de pistola. La noticia fue enorme. Los principales medios de México se hicieron eco de todos los detalles, al igual que muchas fuentes de noticias más pequeñas y muchos sitios web de noticias de EE.UU. como CNN, NBC y otros. Los motores de búsqueda incluían múltiples páginas sobre este suceso. Algunas fuentes de noticias sugirieron que los empleados fueron recontratados más tarde, pero entonces no eran miembros del sindicato, y nunca volverían a serlo. Me interesó tanto que volví al día siguiente para conocer los efectos de todo esto. No había nada. Todos los sitios web de noticias mexicanos habían sido limpiados. Había guardado algunas direcciones URL, pero todos los enlaces habían desaparecido. Estaba tan decidido que busqué durante varias horas, incluso en sitios web de noticias mexicanas de segundo y tercer nivel, pero no había nada. Lo mismo ocurrió con las fuentes de noticias de EE.UU.; todas las páginas web e incluso las menciones casuales de este acontecimiento habían sido cuidadosamente borradas, y Google y Bing de repente no tenían memoria de ello. Era como si nunca hubiera ocurrido. Me quedé de piedra. ¿Quién tiene tanto poder sobre los medios de comunicación?

Esto me lleva al día de hoy, con dos temas de interés actual, ambos relacionados con Elon Musk. Durante los últimos años, casi todas las fotos de Elon Musk parecían diseñadas para que pareciera mono, adorable, infantil e inofensivo. Casi todas las fotos le mostraban con una sonrisa tonta y unos ojos desorbitados de niño de tres años, como un lindo cachorrito. Retrasado, pero mono. Adorable, incluso. Eran estúpidas, por supuesto. Un hombre de 52 años, supuestamente el director general de grandes empresas, posando como un niño pequeño o un cachorrito retrasado con una sonrisa tonta y sus "adorables" ojos de reojo. ¿Os imagináis a Warren Buffet posando para esas fotos? Nadie que no sea un niño haría algo así. En total, debía de haber cientos de esas fotos, todas parecidas o iguales.

Quería utilizar una de esas fotos para ilustrar un artículo de mi serie Debunking Elon Musk (Desacreditando a Elon Musk), pero esas fotos han desaparecido, sustituidas por fotografías esencialmente normales. Una vez más, estaba decidido, y busqué durante varias horas sin resultado. Una vez más, pedí a amigos de otros países que utilizaran sus motores de búsqueda locales, pero sin resultado. Parece que todas y cada una de esas fotos han sido borradas de Internet. No me sorprende, porque las fotos eran en realidad bastante estúpidas, aunque obviamente formaban parte del programa de "construcción de leyendas". Pero la cuestión es que alguien ha hecho un enorme esfuerzo por desinfectar el mundo de Elon Musk, y aparentemente con gran éxito.

El siguiente punto es más serio. Elon Musk ha hecho o ha aparecido en al menos cientos y posiblemente miles de vídeos en YouTube y otros medios, así como en muchas declaraciones en Twitter. En muchos de estos vídeos y mensajes, Musk hizo declaraciones increíblemente desinformadas, engañosas y estúpidas. Algunas de ellas eran predicciones descabelladas de cosas que haría o acontecimientos que ocurrirían; muchas declaraciones eran simplemente balbuceos incoherentes y extraños. Como ejemplo, Musk promovió repetidamente la detonación de bombas nucleares en Marte como parte del proceso de "terraformación". Quise hacer referencia a algunos de ellos para uno de mis artículos, y de nuevo me sorprendió descubrir que casi todos habían sido eliminados de Internet. Estas supresiones se hicieron casi con toda seguridad bajo la dirección de Elon Musk en un intento de borrar el registro de gran parte de sus comentarios públicos, cuyo contenido se ha vuelto cada vez más embarazoso con el tiempo. Los empleados de Musk se encargaron de rastrear Internet y eliminar cientos de horas de contenido de Musk que era estúpido, vergonzoso, incoherente, extraño y, en general, poco inteligente.

El borrado de contenidos de Internet es una forma moderna de quema de libros.

Este artículo aborda preocupaciones fundamentales sobre la conservación de la información, la censura y el control del discurso histórico y contemporáneo. El borrado de contenidos de Internet es una forma moderna de quema de libros, especialmente cuando implica la eliminación de material polémico, incriminatorio o políticamente inconveniente. Mientras que la quema física de libros es un acto visceral y simbólico de destrucción, el borrado digital puede ser más insidioso porque a menudo se produce sin escrutinio público. El contenido puede desaparecer silenciosamente, sin dejar apenas rastro ni responsabilidad. La naturaleza efímera de Internet significa que, a menos que la información se archive activamente, puede desaparecer de forma permanente.

La eliminación de contenidos que se hace abiertamente suele justificarse bajo términos de incitación al odio o desinformación, pero la línea que separa la moderación de la censura es, en el mejor de los casos, borrosa. Personas poderosas pueden provocar estas supresiones, ya sea directamente o a través de presiones sobre las plataformas. Es importante tener en cuenta que los principales sitios web de noticias pueden responder a una petición de alto nivel para eliminar un artículo, pero hay muchos sitios web de segundo, tercer y cuarto nivel a los que no les importa lo que otras personas quieran, y publicarán lo que les plazca. No se eliminan contenidos de estos sitios web con una petición; lo más probable es que eso sólo se consiga mediante amenazas, intimidación o extorsión.

La verdad es que aunque Internet permite un acceso sin precedentes a la información, también permite un control sin precedentes sobre esa información, y la cuestión entonces es quién decide qué se elimina. Los judíos controlan, normalmente por propiedad, a veces por otros medios, prácticamente todos los medios de masas y sociales de gran parte del mundo, ciertamente en lo que definimos como "Occidente" pero también ampliamente en los otros continentes. En muchas publicaciones judías, los judíos se jactan de su propiedad y control de los medios de comunicación y de Hollywood; sin embargo, si un gentil se atreve a exponer los mismos hechos, la respuesta invariable es la negación en voz alta y ataques personales despiadados que a menudo son social y financieramente fatales.

La guerra de Israel contra la censura en Internet: si los estadounidenses lo supieran. Fuente del vídeo  

La mayor parte de la historia judía está enterrada, y la mayor parte está enterrada muy profundamente, y por muy buenas razones. Los judíos han cometido enormes crímenes que la historia ha atribuido a los británicos o a los franceses, o a los estadounidenses.

Esta circunstancia se ve enormemente favorecida por el control virtual que los judíos tienen de todos los medios: los medios de comunicación de masas, los medios sociales, las herramientas de Internet como Google y Wikipedia, las editoriales de libros y mucho más. He escrito a menudo que el único valor de la libertad de expresión radica en tener el control del micrófono, pero en nuestro mundo real sólo los judíos tienen esto en una medida apreciable, los canales restantes se cierran rápidamente.

El poder de amordazamiento de los judíos está muy presente hoy en día. De hecho, la mera mención, el llamar la atención pública, de hechos completamente inocentes relativos a os judíos, es suficiente para generar acusaciones amargas y bastante sucias de antisemitismo, de ser nazi o racista. Es muy desagradable. Una vez observé en un foro en línea que los judíos estaban sobrerrepresentados en las profesiones (medicina, odontología, derecho, contabilidad) muy por encima de su porcentaje en la población en general. No recibí ningún comentario. Pero cuando añadí que los judíos también estaban sobrerrepresentados en los medios, las editoriales y el mundo del espectáculo, así como en el gobierno de EE.UU. (como es el caso), mis observaciones generaron inmediatamente múltiples ataques personales de antisemitismo, de ser un "odia judíos" y más. Alison Weir escribió un excelente artículo [²] sobre cómo Israel y los judíos trabajan para controlar la información en Internet, y específicamente para eliminar cualquier contenido "antisemita", que generalmente se define como cualquier cosa que los judíos no quieren oír o no quieren que tú oigas.

https://es.sott.net/article/99666-Estan-quemando-los-libros